Sí, que me borren de este horrible mes, del 2014. En él mi querida Elisa se ha marchado para siempre, he visto truncados multitud de sueños; me han dado la alarmante noticia de que el test de cáncer de colon, ha dado positivo o falso positivo. No sé si como consecuencia, mi tensión arterial es un vertiginoso carrusel. Hoy, aniversario de la muerte de mi padre, me han llamado porque a mi dulce Pardita le ha salido un bulto sangrante en un costado. ¿Hay quien dé más?
Yo me apeo, me bajo de este ruin septiembre.
No voy ni a arreglar el velamen. Esperaré a octubre para surcar de nuevo esos mares calmos que nos ha regalado este verano espantoso de calores. Esperaré a octubre para sentir la brisa fresca en mi cara, para enfrentar las crestas de las olas... Esperaré hasta octubre.
Que quede entre nosotros
No hay comentarios:
Publicar un comentario