domingo, 17 de mayo de 2009

Reencuentro

Todo es como un enorme regalo. El tiempo, ése que antes se me regalaba a raudales, vuelve a ser mío. Y gracias a él, a través de él y mi curiosidad, se produce el reencuentro.

Mi hermano está ahí, con nuevas páginas, con la misma sensibilidad, con la misma ternura, con el mismo amor... Y es un gozo volver a saberlo a través de ese derramarse sin disfraces tan propio de él, tan él.

No hacen falta ni miércoles para sentirlo como lo siento ahora.

Es un enorme regalo este feliz reencuentro.

Te quiero, siempre.


Que quede entre nosotros

No hay comentarios: