lunes, 13 de noviembre de 2006

Cruce de caminos, lucha tenaz y luna.


Me gustaría llevar siempre mi cámara en ristre, pero es un latazo, pesa e incomoda. Cuando lo hago, mis ojos me llevan siempre a aquello que rompe con los cánones y lo capturo. Se la mostré a mi hermano y dijo que era magnífica (ya se sabe cómo nos queremos), aunque a mí también me parece "rompedora". La dejo aquí para que la veáis, la disfrutéis o la ignoréis. Es una muestra de la propia vida. El progreso y la naturaleza luchando enérgicamente por sobrevivir con un testigo de excepción, la luna en pleno día. Es un retazo de miles de momentos en que lo duro, lo penoso, se ha ido aposentando en nuestros corazones, dejándonos temporalmente abatidos. Después, de lo más hondo de nuestras entrañas surge la voluntad, la fuerza que representa ese arbusto queriendo abrazar postes y cables, poseerlos y demostrar que no es fácil vencernos. Y qué mejor y más romántico que esa luna asomándose para contemplarlo.
Que quede entre nosotros

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Se nota que eres muy observador.
Bonita foto.

Besotes.

nadie dijo...

Creo que el término es muy acertado: "rompedora". jejeje!!
Curiosa la vida, eh?

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con tu hermano, es magnífica, y me gusta esa lucha entre el progreso y la naturaleza. Me recuerda tantas cosas...

Me quedo con la vida.


Besos

Anónimo dijo...

Querido Meph,
voy a hacer una colecta para comprarte una cámara más chiquitita y que puedas llevarla más a menudo. Merecerá la pena.
Un besazo.

. dijo...

Un poco tú, nuestro reflejo...