martes, 20 de junio de 2006

El tiempo pasa

Recuerdo (la realidad es que me ha venido la inspiración justo en este instante), la canción de Pablo "...el tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos".
La verdad es que no sé a qué se refería Pablo con aquel "nos vamos poniendo viejos". La verdad es que en mi interior sí reflejo el amor como ayer, o mejor que ayer, o mucho más que ayer.
Miro en mi interior y es tal el potencial que existe que a veces me asombro. Ya no hay intereses, ni ambiciones, ni carreras a ningún sitio. Por eso sé, lo noto, lo siento, que tengo más potencial de amar que ayer.
Sí, ya sé, el cuerpo no es el mismo. La carne no es la misma... ¡Aunque entonces era tan bisoño! ¿Cómo se van a conocer las cosas que nunca se han hecho? ¿Cómo se va a tener experiencia en lo que se comienza a hacer?
Hoy, cuando he recorrido cientos de autopistas, cuando he recalado en miles de sueños, cuando he comprendido que su placer es lo importante porque me causa placer... Hoy, no existen almohadas que compartir.
Ya no existe la caricia, ni la ternura de una mirada sostenida, ni la voluptuosidad de un beso, o de cientos; ni el sudor que provocas o provoco, ni los olores..., ni el deseo de comenzar de nuevo cuando apenas un minuto antes, uno había creído llegar al final.
Por eso, porque el tiempo pasa, porque no estamos donde querríamos estar sino donde hemos aceptado estar... Siento que sí, que ahí sí nos vamos poniendo viejos.
Que quede entre nosotros

No hay comentarios: